LA ABUELITA





DÍA 74, its the day (lunes 25)

Me despierta a las 7:15 de la matina mí alarma maravillosa del teléfono móvil. Unos monos con platillos cantan en mí cabeza: “Oh bella chao bella chao bella chao chao chao”. Bah, Bea que te va a salir bien. Has estudiado y te sabes mucho. Así es. En pie. Todo lo que me he estudiado me lo sé. Claroooo.


¡Venga que tú puedes!


Desayuno bebida de arroz, con avena integral y cacao puro en polvo, un puñado de nueces y un plátano.

8:15: Me voy al comedor (que es dónde me llega mejor la wifi) y dejo el portátil. Salgo. Coloco un cartel por fuera de la puerta de “la casa de mis padres” por si alguien llama DING DONG, que no insista, si no le abre nadie. Vuelvo a entrar. No espera, me hago pis. Salgo. PIS. Entro. Y, ya no salgo. Ritual pre-examen: Cierro puerta, ventanas, bajo hasta la mitad una de las persianas (en un ratín empieza a pegar todo el solano y no veas, niña), me pongo el aire acondicionado, voy encendiendo el portátil. Me siento. Respiro.

Suerte. Venga. Al lío bei. Nervios. Not nervious. Hecho.


Comemos. Me preguntan en casa por el examen. Les cuento. Siesta merecida. Tarde libre. No hago ni el huevo. Hablo con alguna amiga y ya.


[ Ayyyy, es que os tengo que contar una cosa tan tierna ]


Primero os pongo en situación. ¿Os acordáis, cuando os conté el otro día, que la del 5.º y yo éramos las únicas que aplaudíamos? Pues, ese fue, de los últimos días que aplaudí.

Y, este viernes pasado, de repente oigo unos aplausos sueltos. Solo esos. Al momentín, cuando vi que nadie se sumaba, salí a ver quién aplaudía. Era una abuelita tan entrañable (fan de los abuelitos), me quedé mirándola y pensé. Simplemente, pensé con amor.

Y, me dije a mí misma: “¡Va el sábado salgo con ella a aplaudir!” El sábado 23 de mayo, se hacen las ocho en punto y la abuelita no salía. Y, dije: Bea sal tú sola. Y, eso hice. Cuando me puse a aplaudir, empezó a salir un montón de gente y, entre ellos, la abuelita. La emoción que me dio fue, demasiado brutal.

Y, cuando ya los aplausos se terminaron, la abuelita (LLORO) me saluda y me manda UN BESO con la mano. No sé, me dio tanta emoción, y desde ese día he vuelto a salir a aplaudir. Por ella. Que aunque no la conozca me apetece que se sienta arropada. Por hacerle la cuarentena en fase 1, lo más entretenida y bonita posible. Por que cuando se meta en su casa, se vaya feliz.

Es que es súper mayor. Se le ve, cuando se mete en su casa va súper despacito, y le cuesta andar. Pero se le ve, (yo lo noto) y si lo noto, mí intuición me dice que es una abuelita entrañable, tierna y adorable.

Hoy, le he mandado un beso y ella me lo ha devuelto. Es con lo que me quedo del diario de la cuarentena de hoy lunes.


Me emociono cuando escribo estas cosas porque las escribo con el corazón.


[LO VIVO, LO SIENTO, Y AMO ESTOS MOMENTOS]

Ella, también tuvo la edad que tú tienes ahora.


Aprovecha el tiempo, haz cosas bonitas, piensa en los demás, sé buena/o, piensa con el corazón, ama, ten pensamientos buenos, aprende a perdonar, haz las cosas porque sí, sin esperar nada a cambio.

Y, por último, cuidado con los juicios de valor sobre las personas, antes de hablar, criticar, piensa si te gustaría que te lo dijeran/hicieran a ti y segunda parte, NO SABES LO QUE ESA PERSONA ESTÁ PASANDO EN ESOS MOMENTOS.


Ale, todo dicho.


¡Espero que estéis pasando un feliz comienzo de semana!



DÍA 75, pon tu granito de arena (martes 26)

Apetece, va. Es pronto. Pero hoy, ¿qué me pasa? Pues, titi que llevas sábado, domingo y lunes sin haber entrenado. Y, son DÍAS sin entrenar. Ponte las pilas. ¿Qué pasa con todo lo que has conseguido? No puedes rendirte, tienes que seguir avanzando (esto lo podéis aplicar a otras situaciones). Recuerda CUERPO y MENTE en la misma sintonía.


Cuerpo y mente, cuerpo y mente, cuerpo y mente (bis).


Así que, ponte la ropa de deporte y dale caña. Voyyyyyyyy.

Magia. Lo hice. Me ha costado hacer hasta los burpees. Pero, los he hecho casi todos, solo me he dejado dos. Y, ahora estiramientos.


Brrrr brrrr”: vibra el móvil. A ver, quién es. ¡Anda! Sms Correo Express: “Hoy recibirá el envío xxxxxxxxxxx de Sara xxxx xxx”. Guauuuu. Dentro de nada tengo aquí las mascarillas Zero Waste que me he pedido.

¿Conocéis el movimiento Zero Waste?


Traducido al castellano quiere decir: “Residuo cero”. Este movimiento se basa en la reutilización de residuos. Empezó, hace ya algunos años. A este cambio de pensamiento, se sumaron miles de empresas lanzando los famosos cepillos y pajitas de bambú, desodorantes, geles para el cuerpo, champús en formato pastilla, discos demaquillantes de tela de bambú y de tela de algodón Pima, etc.


Esto ya os tiene que sonar algo más, ¿verdad?


Con ello, lo que se quiere conseguir es reducir al máximo los residuos (papel, vidrio, plástico, etc) y la basura (pajitas, toallitas, cepillos de dientes, botes de champú, etc) que generamos en nuestro día a día.

Es un estilo de vida con el que ayudamos al planeta. Y, que con pequeños gestos y pequeños cambios puedes contribuir a la mejora de este.


Bueno, después de esta mini intro, quiero enseñároslas.


Y, contaros quién me las envía.

Bea, ¿Nos puedes decir ya quién las ha hecho? Síiii, ella → @sara.rimoldi_terapias Es la persona que me ayudó con las dichosas migrañas que tuve hace unos días. ¿Os acordáis? Que es Terapeuta, Osteópata, Masajista, etc. Y, un encanto de chica, por cierto.

Pues, un día vi un storie suyo en el que salía con una mascarilla CHU – LÍ – SI – MA y le escribí: “¡Ey, qué bonita es tú mascarilla! ¡Quiero una igual! ¿De dónde es?” y, me dijo: “Me la he hecho yo”.


¿Las vendes?


Afirmativo. Vale, pues esa la quiero. Aunque, por ese precio creo que quiero dos, así tengo para intercambiar.

Así que, si vosotrxs queréis una mascarilla Zero Waste tan chula como la mía... ¡Ya sabéis! Entráis en su perfil de Instagram, vais a la carpeta de destacados en la que pone “tela mascarilla” elegís la tela que os guste y le escribís un mensajito. ¡Así de fácil!

Por cierto, el packaging es una monada. Abres la caja y ¡Sssssssshhh! ¡Es sorpresa! Vale, vale calladita. Bueno, cuando lo pidáis lo veréis. Solo os adelanto que se nota el mimo y la ilusión que hay detrás. 

Volando me pongo ya a estudiar hasta las 19:30, que voy a hacerle una visita a mí abuela. ¡Qué alegría se ha llevado! La pobre está hasta el mismísimo de la cuarentena. Eh, pero os digo una cosa que no se pierde el maquillarse los ojos y echarse máscara de pestañas. Ojo, y bien que hace, que con 96 años que tiene y tenga esa ilusión de arreglarse, es una auténtica pasada.


Presumida. Como su nieta.


Cena rica de mí cocinera favorita y a dormir pronto que hoy estoy, agotada. Good night.



DÍA 76, piset (miércoles 27)

Me dejan sin gym (guiño, guiño), pero vale la pena. MUCHO. ¿Y eso? He quedado con los compis de la universidad, con las personitas que compartí piso y vida en primero y en segundo de carrera.


Que mole, ¿no? 


A las once en el Ayuntamiento. En Correos. Voy andando. Ey, Beatriz ¡Estás hecha una valiente eeeh, tú sola hasta el centro en cuarentena! ¡Wooooooow! ¡Quién te ha visto y quién te ve!

Poca broma. Como casca. Para cortos y tirantes. Ya, pero estoy más blanca que la leche. He optado por unos mom fit y arriba manga corta básica. Y, me aso.


31º


Llego. Ni un alma. Llamo a Afri: “Tía estamos en Correos. Quedate ahí, que vamos hacia donde tú estás, ¿vale?” No le hago caso y me acerco hacia donde están. Me pueden las ganas de verles

Cuando los veo de lejos, oigo a Julián decir: “Mira ahí está la Bea” (me pone mala el determinante determinado femenino singular delante del nombre, pero como es él... se lo perdono) y me pongo en medio de la calle a levantar los brazos y a moverlos de un lado a otro (feliz, como animando). Rubén y Julián se ríen y el susodicho, vuelve a decir: “La Bea que loca está”. 


¡Ay, estoy contenta de veros!


Buscamos un sitio donde tomar algo y brindar por estar juntos otra vez después de unos cuantos ¿meses? Que vaaa años. Me ha encantado volveros a ver.


Buscamos una terraza. “Cocoa”.

Preguntamos. ¿Podemos juntar las mesas? Somos 6. “Sí claro, ahora vengo a tomaros nota”: nos responde un camarero molt molt templat.

Cachondeito del bueno. Fotitos. Abrazos. Risas. Cervezas. Claras. Brindis. Olivas. Mezcladillo. Recuerdos. Marcando fecha para irnos de finde a casa de Julián. Tema blog, ¿Y, pones también los jajajas? Afri: “Leelo, está muy guay, yo me lo leo y mola mucho”. Tema cuarentena. Tema novixs, ex de varixs de nosotrxs. Estudiar. Exámenes. Movidas varias. Que si el camarero está muy bueno. Reflexiones de la vida en general. Que si Julián me tira kikos debajo de la silla para que me ataquen las palomas. Mamón. Jajaja. Bea. Sí, la Bea. Que si alguno no se aclara con las fechas de los exámenes. Que si Tinder o Hills. Bizum de 0,20 céntimos. Que otra vez, que menudo el camarero. Que si dile algo. Que no le decimos nada. Que si te has puesto la mascarilla para ir al wc. Que en vez de coger aceitunas con dos deditos, nos las tiramos en la palma de mano. Lo que toca en tiempos de cuarentena

Y, digo yo... ¿Quién sino Beatriz? Pues, también es verdad. Querido/Odiado “Corona Virus” has tenido que aparecer para reunirnos otra vez. ¿Eh, o no? Hagan sus apuestas. Ahí lo dejo.


Sabes que sí.


Nos despedimos con un “La semana que viene, el que pueda que lo diga por el grupo y quedamos”.



Que rápido se pasa lo bueno y que guapxs estabáis todxs.


Cada uno se va en una dirección. Vuelvo a casa andando. Medio día, con nada más y nada menos que 35 gradazos. Mmmm que rico. Calorcito. Voy rápido con el paso acelerado para llegar lo más pronto posible a casa. Para. Frena. Riiilax. Sí porque creo que tengo los pies bonicos. Se me están haciendo ampollas en los pies. Que ya verás, ya.

Llego a casa. ¡Qué bien algo de comer fresquito! Ensalada de arroz. De postre fresas.

Al terminar de comer me siento en la cama y al final me tumbo y caigo. Grogui. Sopa. Me duermo. Siesta time. Poco. Veinte minutillos. Me levanto, me lavo la cara para quitar el empanamiento post sobada y me pongo a estudiar.


En un descanso para beber agua, miro el móvil. Tengo un audio mí amiga Flo: “¿Te apetece ir al centro? Quiero ir a alguna tienda y luego a la zona del Carmen”.

Uyyy, ¡lo que te han propuesto! Un mix muy irresistible. Inevitable rechazar algo así. Y, lo mejor la compañía. Le escribimos a Andrea pero está con su TFM y lo tiene que terminar, ya sí o sí. Tranqui que el sábado llega pronto y comemos en Saona.

Termino de estudiar y se hacen las 19:15. ¿Mascarilla? Sí, puesta. ¿Gel desinfectante? También en el bolso. ¿Dineroosss? Sí, la tarjeta (aunque no creo que compre nada). Bajo a la calle. Acudo a donde hemos quedado. Y, nos vamos a pie al centro. Cuando cojo un momento el móvil para ver que hora es, me pone que he alcanzado los 10.000 pasos hoy. Gracias móvil, por recordarme que voy a terminar con los pies...


Llegamos a Don Juan de Austria. Vamos primero a Pull & Bear. ¿¿Cola para entrar??

Nos ponemos en la cola. Tenemos delante 5 personas. Esperamos. Cuando ya nos toca, entramos a la zona de desinfección. Y, un dependiente con mascarilla nos aprieta un botón de un dispensador de gel desinfectante. A chorro cae. Frotamos manos y entramos. Me muevo un poco la mascarilla para olerlo. Y, huele a alcohol puro y duro. ¡Puag! Damos una vuelta y le digo a ver si encontramos una falda que es así y así, tipo midi. Pero negativo. No está. Le pregunto a una dependienta, y me dice: “Está agotada pero que tiene esta (me la describe) y además está con descuento”.

Me pregunta talla. La M. Me la trae. Gracias. De nada, guapa. La miro pero no me convence mucho porque tiene las flores muy grandes. Lo que me gusta es su precio, que no llega ni a 10 €. Voy al probador a ver que tal. Espero a que salga alguien. Sale una chica. Desinfectan el probador. Paso.

Pero una vez dentro pienso: “Y, ahora me tengo que quitar las zapatillas, los pantalones, desabrochar el cinturón...Uf, me da rollito con esto del Covid. 

Vale. Opción única me bajo los pantalones y me los dejo a la altura de las rodillas, me meto la falda por la cabeza, la abrocho con una cremallera que lleva a un costado y... Tacháaan ¡Me viene enorme! Nada tía, que con los burpees, las cremas y comiendo comida real, te has quitado toda chicha de la cintura. Tal cual. “La dejo, me viene muy grande”: le digo a Florencia.

Vamos hacia Mango. Aquí el mismo procedimiento. De aquí nos gustan cosas, pero lo que nos gusta, es muy de verano y no nos hace falta de momento nada. 


¿Vamos hacia el Carmen?


Andamos hasta la Plaza de la Virgen. Entramos a la virgen. Desinfección de manos. Pido y rezo un “Dios te salve María” por las personas que han fallecido y por las personas que se han recuperado. Nos vamos.

Charlamos. Paseamos por la calle Caballeros, nos metemos en la calle Calatrava hasta llegar a la Plaza del Negrito. Aquí, no hay ni un alma, os lo prometo. Nos quedamos escuchando el sonido de la fuente, que en otros momentos, es imposible escuchar por la cantidad de voces y de sonidos varios que al mismo tiempo se oyen. 

¡Qué bárbaro esto! ¡Tenéis que ir a esta plaza! Sentir y reflexionar. Conmovedor.

Volvemos a casa.


Conclusión de la tarde: tenemos las manos desinfectadas hasta el 2021 por lo menos.


Cena buenísima. Crema de calabaza de primero. Dorada al horno con cebolla, ajito, perejil y una especia para pescado que compraron en Marruecos, que me encanta. De acompañamiento una sepia medianita. Postre no tomo.

Muyyyy cansada. Doy las buenas noches y a las 23:00, a la cama. No miro ni el móvil. 


DÍA 77, un poco de todo (jueves 28)

Oleee, el cuerpo ya se está acondicionando a “La vida normal”. 9:15  y sin despertador.

Claro, pero es que ayer a las 23:05 ya estabas dormida fijo. ¡Tú sabeeees! Fuiste al centro dos veces en el mismo día y volviste andando las dos veces Tendrás unos gemelacos, duros como rocas. COMPROBEMOS. Me los toco. Ostras, vaya. Como una piedra.

Me he despertado con ganas de volver a hacer surf. De tener ya la furgo camperizada y viajar al sur, al norte. Un poco de todo.


¿Habéis hecho alguna vez Surf?


Pero como de momento no se puede. Te toca desayunar y gym a las 12. Venga, a la cuina. Espera que tengo que abrir la persiana, abrir ventana y la cama para ventilar. Venga. ¿Ya? Ya. ¿Qué te apetece hoy? Esto: Queso batido con 4 dátiles cortados a trozos, 1 plátano, avellanas, cacao puro en polvo y un vaso de bebida de arroz.

Entreno. Ducha.


Huele a algo al horno. Ojalá haya arroz al horno. Sí, que hay arroz al horno. Comemos. De postre fresas.

Estudiar. Repasar el blog y dejarlo preparado para publicar new post a las 21:00.


Aplausos y beso con la abuelita. La sensación con la que TE QUEDAS cuando cierras la ventana. Es MAGNÍFICA.



Gracias por seguir conmigo en esta aventura, cada vez sois más los que os sumáis conmigo en esto.

Os estoy muy agradecida.

- ℬ -



IMÁGENES: DEBBIEJONES, TUMBLR,

@PALABRAS_DESCAFEINADAS,

MADABOUTSTYLEBOUTIQUE.


© 2020 BeiBel. Todos los derechos reservados.




Comentarios

ENTRADAS POPULARES