SEGUNDA PARTE DEL DIARIO DE LA CUARENTENA
[Título 2: LA POST CUARENTENA]
No sé ni cómo empezar. Va, Bea ¿qué no sabes cómo empezar? No te creo. ¿Vosotrxs os creéis esto?
Abro un nuevo documento de Word. Uno en blanco y le pongo de título: "2ª Parte Diario Post Cuarentena". De fondo, suena la canción “Fix You” de Canyon City en una de mis listas favoritas: “Covers 2020”. Y, me da emoción mientras la escucho estar escribriendo todo esto, pero, sobre todo, por verme aquí.
Así soy yo. Una sensiblona de los pies a la cabeza.
Después de unos meses duros. Desagradables, para muchos, hemos llegado por fin, al fin de la cuarentena. He pensado, que a partir de ahora, la estructura de cada POST va a cambiar un poco, voy a seguir escribiendo, pero no por días, sino un poco de manera más general. A no ser, que algún día quiera destacarlo “muy mucho por equis motivo” lo voy a hacer así. ¿Estáis conforme? ¿Os gusta este cambio? Antes escribía por días, por contabilizar el confinamiento y ver qué iba ocurriendo EN EL DÍA A DÍA.
(Pero, que si os gustaba más cómo antes, dejádmelo en comentarios o escribidmelo por sms. Lo valoro y veo qué hago, ¿vale?).
Qué raro se me hace escribir esta segunda parte del Diario. Si parece que fue ayer cuando empezó todo. He de decir que hice “una porra conmigo misma” (nadie se quería apostar nada) ¡Qué cagaos! Y, dije, que el confinamiento se terminaría a finales de junio/principios de julio. No me he ido mucho, ¿no?
¡Es que hemos vivido como una película!
Nunca pensé que seguiría escribiendo. Y, tampoco que estaría viva para poderlo escribir. Os habéis quedado un poco alucinadxs con esto que acabáis de leer, lo sé pero, es la realidad. Tenía mucho miedo a La Pandemia. A contagiarme. A contagiarnos. Todos. Los primeros días tenía el MIEDO literal metido en el cuerpo. Noticias y más noticias. 24/7 de noticias. Gente. Más y más gente contagiada, muriéndose.
Además, no tenían muy clara la situación. Nadie. A ver, no culpo a nadie, pero parecía un poco un “Sálvese quien pueda”. ¿Lo veis así? Yo, sí. Es más, conforme pasaban los días, ya no tenía miedo. Mentira Bea. No, no, espera. Me daba terror. Estaba ACONGOJADA. Por no decirlo de otra manera. El que no estaba asustadx miente un poco. Creo. Es bien, si no tuviste miedo, terror o equis.
Ojalá no vivamos más una situación como la que hemos dejado atrás. Sé, que sigue. Pero, hablo del confinamiento. Del estar encerrados. Del ir en pijama, con moñete y sin maquillaje. Del comprar papel higiénico para todo el vecindario (si te quedaba en la tienda, claro). De hacer la compra muy rápido y una vez a la semana.
De aplaudir a las ocho TODOS en la ventana. De estar más unidos que nunca. De lavarnos las manos cada vez que tocábamos algo, que igual podría “estar infectado”. Mareeee, es que esto que hemos vivido ha sido muy fuerte. De si alguien tosía en casa, le mirábamos raro. De reñir a mi padre por bajar a comprar el periódico. De tomar el sol en la ventana.
De subir al terrao a tender las sábanas y escuchar muy cerca el helicóptero. De bajar a tirar la basura sin rechistar. De “envidiar” al que tenía perro, o terraza que diera el sol por la mañanita. De abrir la ventana en plena noche, antes de irte a dormir y no escuchar absolutamente nada. Esto último, me ponía el vello de punta. Ha sido muy fuerte todo esto. Anda que no. Seguro que me dejo algo. (Si me he dejado algo y te apetece escribirlo, ya sabes, abajo en comentarios).
Me pongo melancólica. No sé. Pero, gracias al confinamiento empecé a escribir. Lloro. Paro. Voy a disfrutar de estas lagrimillas. ¿Qué hubiera sido de mi, si nunca hubiera escrito? No es que yo sea ahora aquí una escritora ejemplar, como lo fueron Lope de Vega, Miguel de Cervantes o Pío Baroja, entre otros. No, no soy ninguno de ellos. Eso lo sé. Pero, creo que para escribir tienes que tener un mínimo de talento, ¿no?
Veréis, principalmente empecé... (os lo dije). Siempre me ha gustado. Y, con esto de estar confinados, me ha venido de maravilla. No me iba a pasar el día sin hacer nada. EL TIEMPO ES ORO. Empezar esta aventura para desconectar un poco de todo esto, me ha ayudado a evadirme. Pero, totalmente. No sabéis cuánto. A calmar la ansiedad provocada por diferentes factores. Familiares y personales. Lo sabéis, lxs que leéis el blog desde el principio, sabéis de qué hablo.
Creo, que esto marca. El hecho de haber vivido momentos desagradables hace que pares, pero que pares de verdad, y te digas: “¿Por qué aguantaría esto? ¿Y, esto otro? ¿Por qué me creí esto que me dijo aquella vez de que...?” ¿De verdad merezco esto? Y, lo reflexionas todo. Hasta el más mínimo detalle. TODO. Hasta que te dices a ti misma, esto, nunca más. Este, fue uno de los motivos por los que también, empecé a escribir. Estaba desolada, destrozada. Malhumorada. Sin ganas de vivir. Os lo juro. Lloro.
Va, Bea. No sigas haciéndote más daño. Tú vales mucho. ¿Seguro? Seguro.
Bueno. Calma. Sécate esas lágrimas. A veces, me siento así. Os quería hacer una intro cortita, así que, ya no me enrrollo más. Os lo prometo. Pero, me apetecía hacer un poco de intro. ¡Intro dice! Intro larga. Vale, sí. Una intro “a mi manera”.
¿Sabéis que aún no he ido a la playa? No. Ni a la piscina. ¿HOLA... y, a qué esperas? Pues, el otro día me dieron la nota del segundo examen y me ha ido mal. Y, me merecía tanto aprobar. Jod**. Estas cosas dan mucha rabia. Prohibido que me escribais para decirme que no pasa nada por este examen. Por favor. Que me quiero olvidar. Me podéis escribir para decirme lo que queráis pero del examen este, ni hablar. ¿Entendido?
Pues, ayer, día 1, abrió el gimnasio. Y, allí que me fui. La noche de antes me preparé todo, como cuando te ibas de pequeña de campamento y te dejabas la mochila preparada. ¿Os acordáis? Pues, igual. Son las ganas. Y, hoy, también. Con Kris. Mano a mano. Las dos frente al espejo. A mi derecha. Suena el primer track de Body Pump. Uf, me las aguanto. ¿El qué? Las ganas de gritar: ¡Por fiiiiin, aquíiii! Jajajaja, es verdad. Y, coreo nueva. Pelos de punta cuando hemos empezado. Emocionadas. Lo sabes, Kris. Sí. Sí. Nos sonreíamos. Creo, que es lo que necesitábamos. ¿A que sí bonita?
Eh. ¿Quién tiene agujetas ya? Mañana vamos a flipar cuando despertemos. Verás. Veréis.
¿Vosotrxs ya habéis ido a la playa? ¿Con ganas de hacer mil planes? ¿Habéis vuelto al gimnasio? ¿Cómo se presenta vuestro verano? Contadme, ¡os leo! ♥
[LAS GANAS, QUÉ TODO LO PUEDEN]
- ℬ -
Nunca más volví a escribir en el blog pero sí que sigo haciéndolo
por medio de mi perfil de INSTAGRAM: bei.bel
© 2020 BeiBel. Todos los derechos reservados.
Cómo te entiendo... más cuando aquí donde estoy, seguimos en pleno confinamiento. No hay opción de salir ni a bajar la basura. Sólo al supermercado, dos veces a la semana seleccionadas en base al sexo y al número del pasaporte. Y durante un máximo de dos horas...
ResponderEliminarSe hace duro. Y vamos 5.5 meses... casi seis. Casi medio año. Es una locura.. y sin embargo? Fíjate. Aún diría que no han sido los peores meses de mi vida. Pero eso da igual.
Lo que quería decirte es que te leo, te escucho y te siento. Ojalá, dentro del marco posible, puedas disfrutar un poquito con tu gente de ese pedacito de libertad con olor a verano.
Me hace feliz veros a la mayoría gozando del clima fabuloso y los días largos y hermosos que nos regala nuestra tierra.
Te mando un abrazo fuerte Bei.
Me encanta tu blog!
Tu tocaya, Zekis.